16 sitios madrileños donde comerte un bocata de calamares excelente

A continuación, desde Condé Nast Traveler nos acercan una guía esencial para conocer los mejores puntos de la capital donde disfrutar del típico bocadillo de calamares, entre los que incluyen nuestra taberna. ¿Nuestra recomendación? Si puedes acompañarlo de una caña de cerveza, mejor que mejor.

Visitar Madrid y no comerse un bocadillo de calamares, si es en los alrededores de la Plaza Mayor mejor, es como ir a Nueva York y no ver la Estatua de la Libertad o irte de Dublín sin probar una Guiness: un sacrilegio. Pasando por alto la paradoja de que una de los manjares más típicos de la capital de España, a más de 300 kilómetros de la costa más cercana, provenga del mar, vamos a intentar explorar los mejores sitios donde os podéis hacer con uno de estos bocadillos.

Su éxito tiene sus antecedentes en la fritanga que en los años 60 y 70 podían oler nuestros padres, estudiantes entonces, en los alrededores de la Plaza Mayor y en calles no muy lejanas como Fuencarral o Noviciado. Es un alimento perfecto para desayunar, almorzar, comer entre horas o incluso cenar. Es decir, se puede comer a todas horas, siempre acompañado de una caña de cerveza fría y bien tirada.

Los calamares pueden ser enharinados o rebozados con huevo; a la romana o en tempura; cortados en trozos pequeños, tiras, anillas grandes o menos grandes, con patas o sin ellas. El pan será ancho o estrecho, crujiente, en baguette, chapata, hogaza o pistola de toda la vida. Puede estar acompañado o no de salsa alioli, mayonesa, limón. Y, siempre a su lado, una caña bien fresquita, con alcohol o sin alcohol, pero preferentemente la cerveza local: Mahou.

¿Ya se os ha hecho la boca agua? Pues vayamos a ver dónde podéis satisfacer vuestros deseos.

13. Los Galayos

A cinco euros podemos degustar jugosos bocatas de calamares en pan rústico tipo chapata (3 euros). Es también el típico sitio para enseñar a tus amigos extranjeros por lo genuino de la decoración y el ambiente.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *